Hugo Nestor Conte es su nombre completo, pero es conocido por mucha gente como "Twister". De chico lo atraían muchos deportes, como por ejemplo jugaba al fútbol de mediocampista, dominaba bien varias técnicas de natación y hasta se daba el lujo de exponer calidad en la zona pintada jugando al basquet. Pero fue Celia, su madre, la que lo acerco a cual seria su deporte de cabecera y uno de sus grandes amores.
Fue en el año 75 cuando después de idas y vueltas, y a los 12 años, comienzo su carrera como voleybolista en GEBA. Mismo club en el que culminaría su carrera profesional en la temporada 2006/2007, ganando junto a su hijo Facundo Conte, su sobrino Martín, Nicolás Uriarte (hijo de Jon Uriarte) y bajo la dirección técnica de Waldo Kantor (amigo y ex compañero de batallas en la selección nacional de los años 80´) el titulo de la Copa Argentina A2. Y de esta manera cumplir el sueño de compartir un campeonato junto con su hijo, que en esa época (y con tan solo 17 años) ya asomaba como una de las grandes promesas del voley nacional.
Así y todo, a sus 44 años se negaba a hablar de un retiro. Un hombre incansable y con alma de ganador. Waldo Kantor, quien lo dirigiera en GEBA antes de su retiro, contaba que jamas lo había visto entrenarse a ese ritmo, y que mientras mas pasaban los años le dolía mas y mas perder.
Pero a mediados del 2007 el club Catania haria una oferta para que el gran Conte fuera su DT. Asi fue que después de lograr su titulo con GEBA se embarcaría para Italia. Hugo ya había formado parte de las lineas del equipo de Sicilia. Y tanto dejo su marca que es ciudadano ilustre de esa cuidad e ícono deportivo del club.
Ese mismo año, el Catania obtendría la plaza para jugar la A2 en Italia y confirmaría como DT para toda la temporada 2007/2008 a Conte. El twister ya habia confesado que la idea de ser técnico y jugador en la liga A2 Italiana no le gustaba, y por eso decidió "ponerle todas las pilas" a dirigir. El retiro fue efectivo, y Hugo Conte dejo las canchas.
Yo por mi parte tuve la suerte de verlo jugar a pocos metros. Y la verdad que dentro de la cancha destilaba calidad. Si bien en sus años mas jóvenes su fuerte fue la potencia, pocos jugadores podían hacer en una cancha lo que hacia Hugo Conte. Un hombre de una gran inteligencia que maracaba los ritmos del partido a gusto y disgusto. Cualidades que le fueron reconocidas al ser nombrado por la FIVB (Federación Internacional de VoleiBol) como uno de los 8 mejores jugadores del siglo xx.
También vistiendo la camiseta Nacional obtendría las inolvidables medallas de bronce en el mundial 1982 y en Seul 1988 (entre otros títulos).
Fue en el año 75 cuando después de idas y vueltas, y a los 12 años, comienzo su carrera como voleybolista en GEBA. Mismo club en el que culminaría su carrera profesional en la temporada 2006/2007, ganando junto a su hijo Facundo Conte, su sobrino Martín, Nicolás Uriarte (hijo de Jon Uriarte) y bajo la dirección técnica de Waldo Kantor (amigo y ex compañero de batallas en la selección nacional de los años 80´) el titulo de la Copa Argentina A2. Y de esta manera cumplir el sueño de compartir un campeonato junto con su hijo, que en esa época (y con tan solo 17 años) ya asomaba como una de las grandes promesas del voley nacional.
Así y todo, a sus 44 años se negaba a hablar de un retiro. Un hombre incansable y con alma de ganador. Waldo Kantor, quien lo dirigiera en GEBA antes de su retiro, contaba que jamas lo había visto entrenarse a ese ritmo, y que mientras mas pasaban los años le dolía mas y mas perder.
Pero a mediados del 2007 el club Catania haria una oferta para que el gran Conte fuera su DT. Asi fue que después de lograr su titulo con GEBA se embarcaría para Italia. Hugo ya había formado parte de las lineas del equipo de Sicilia. Y tanto dejo su marca que es ciudadano ilustre de esa cuidad e ícono deportivo del club.
Ese mismo año, el Catania obtendría la plaza para jugar la A2 en Italia y confirmaría como DT para toda la temporada 2007/2008 a Conte. El twister ya habia confesado que la idea de ser técnico y jugador en la liga A2 Italiana no le gustaba, y por eso decidió "ponerle todas las pilas" a dirigir. El retiro fue efectivo, y Hugo Conte dejo las canchas.
Yo por mi parte tuve la suerte de verlo jugar a pocos metros. Y la verdad que dentro de la cancha destilaba calidad. Si bien en sus años mas jóvenes su fuerte fue la potencia, pocos jugadores podían hacer en una cancha lo que hacia Hugo Conte. Un hombre de una gran inteligencia que maracaba los ritmos del partido a gusto y disgusto. Cualidades que le fueron reconocidas al ser nombrado por la FIVB (Federación Internacional de VoleiBol) como uno de los 8 mejores jugadores del siglo xx.
También vistiendo la camiseta Nacional obtendría las inolvidables medallas de bronce en el mundial 1982 y en Seul 1988 (entre otros títulos).
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